martes, 13 de mayo de 2008

MAS ELECTRONICA, MENOS MECANICA




Así se puede definir la tendencia de los automóviles, irreversible y con un universo de posibilidades por delante. En muchos coches de lujo, el equipo de electrónica y el software con que opera representan hasta 30% de su valor. Y eso incluye aplicaciones defensa a defensa: sensores por todo el automóvil, controles de ventanas y seguros, sistemas de navegación, equipo de entretenimiento y más. Según la Asociación de Ingenieros Eléctricos de EU, los autos con mayor contenido de electrónica y software tienen más poder de cómputo a bordo que el que usaba el Airbus A310, que comenzó a surcar los cielos en 1982. Un dato más: la mayoría de los autos modernos en la calle tienen más tecnología que la nave Apolo 9, en la que el hombre llegó a la Luna. Microsoft, IBM, HP, Intel, Apple y otros fabricantes comienzan a ocupar, de manera no muy discreta, el único reducto que parecía inmune a sus productos: el interior de autos y camionetas. Hasta hace poco su presencia era casi imperceptible y se centraba en computadoras de abordo y sistemas en motores y accesorios. Ahora van por todo para hacerse cargo de funciones como oficina móvil, telecomunicaciones, entretenimiento, navegación, seguridad y asistencia mecánica. Si se tiene dinero para pagar, en Estados Unidos, Europa y Japón, puede uno comprar un vehículo de lujo que haga y reciba llamadas por teléfono celular o satelital, y opere una computadora o PDA: graba mensajes de voz, escribe cuando se le dicta y lee en varios idiomas los mensajes recibidos por SMS y correo electrónico; otros sistemas administran el centro de audio y video, la radio y hasta el iPod. No hace falta despegar las manos del volante, o de donde las tenga el conductor, porque las funciones básicas se operan con órdenes verbales. Pueden aprender incluso órdenes determinadas por el propietario: "Toca música romántica" o "Ésa no, que duele", por ejemplo. Aún más: los autos en 2010 podrán estar conectados todo el tiempo, incluso en movimiento. "Los conductores querrán interactuar con sus contactos, recibir información, entretenerse, navegar, monitorear el tráfico y solicitar consultas en casos de emergencia", asegura Arne Stoschek, jefe de la Unidad de Monitores, Sensores y Materiales del Laboratorio de Investigación Electrónica de Audi/Volkswagen.

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